El inicio

 

          No todo es color de rosa...

         Estuve en Estados Unidos por 2 años, no me acostumbre al país y decidí regresar a Venezuela. Por allá me di cuenta que me encantaba la fotografía por lo que pensé que podía hacer algo con ese arte en mi país así que compre mi cámara profesional.

         Al llegar a Venezuela inmediatamente me dispuse a hacer un curso de fotografía con duración de un año académico en la ciudad de Barcelona, y acto seguido empecé a darle un poco de forma al proyecto. Tenia claro que quería viajar por toda Venezuela tomando mis fotografías, pero para qué?

        Sabia que quería hacer algo bonito, algo para sumar, pero no lo tenia claro del todo. Hice algunos viajes sin propósito claro, visite sitios como el Roraima, la Tortuga, Médanos de Coro, etc, pero le faltaba sentido al viaje.

        Al no ver resultados positivos inmediatos en reiteradas ocasiones pensé en dejarlo todo y realizar otra actividad, pero mi voz interior decía: tu puedes, y es tu propósito, continúa.

        Es así como después de estos viajes sin sentido se me ocurre la idea de viajar a través de todos los pueblos venezolanos y empecé con el Estado Anzoátegui. Visite primero la zona norte, y luego fui hacia el sur. Fue mucha la gente que me apoyo, y aunque es un viaje que pudo hacerse en mas corto tiempo, a mi me tomo casi 2 años poder culminarlo puesto que atravesábamos en aquel momento una situación política y económica bastante inestable.  Mucha gente me apoyo, me ayudo con la estadía, con la comida, etc.

         Llego el 2020 y con el la pandemia, un año de grandes pruebas para todos. El viaje se estanco y tuve que dedicarme a otras actividades para poder transitar aquel tiempo de dificultades. Ese año resulto ser una gran prueba para mi, porque reconocí y aprendí de la negatividad intrínseca que yo guardaba.

      Acto seguido me puse a trabajar este tema y a hacerlo reversible. Es aquí cuando se me ocurre un cuento que 4 años después escribí y que ahora es parte de la gran misión que me he propuesto, llevar ese mensaje a toda Venezuela.

      Del 2021 al 2024 me toco enfrentar nuevas situaciones que seguirían siendo aleccionadoras y que entrarían a formar parte de esa historia que escribí. Hoy 2025 arranco con buen pie, una Juana mas segura, mas madura, mas centrada que aun quiere desarrollar este proyecto con toda la energía y la pasión que corre por mis venas.